A mi me gusta especialmente esta fotografía, porque nos permite apreciar cual es la vida del valle del Jerte en invierno.
En la parte inferior se distinguen los bancales que dividen la pendiente del terreno en pequeñas parcelas cultivables.
Los arboles desnudos son cerezos y los trabajos que se desarrollan siempre van encaminado al cuidado de las fincas y al ordenar los recursos para que la próxima recolección sea lo más fructífera posible. |